Robaron dos casas en un golpe comando en Las Praderas

Viernes//Una banda integrada por seis delincuentes ingresaron durante la madrugada al barrio residencial. Encapuchados y armados, lograron asaltar dos viviendas. La pesadilla duró más de cuatro horas.

Una banda de delincuentes realizó esta madrugada un golpe comando en el Club Campo de Golf Las Praderas de Luján, ubicado en la ruta 192 en la localidad de Open Door. Encapuchados y armados, lograron vulnerar las medidas de seguridad del barrio residencial y asaltaron dos viviendas de la zona del centro. Aunque por estas horas la Policía trata de establecer el saldo del asalto planificado.
Según pudo saber EL CIVISMO Digital, los ladrones interceptaron por las calles internas del barrio a un niño que se trasladaba en bicicleta tras cenar en la casa de un amigo, cerca de las cero horas. Amenazándolo con armas de fuego, la banda logró ingresar a la primer vivienda, donde arrasaron con todo a la vista. Presuntamente, los delincuentes vulneraron el alambrado que da al predio del Haras y conocerían a la perfección los movimientos de la seguridad, que patrulla cada 20 minutos el perímetro. Un dato más que alimenta esta versión es que eligieron casas ubicadas en el centro del barrio y no las cercanas a los alambrados. 
Dos horas después, pasadas las 2 de la madrugada, realizaron la misma maniobra y redujeron al dueño de otra vivienda, en la que se encontraba su esposa. Aunque a esa altura, la banda ya estaba dividida en dos, para que las víctimas del primer robo no dieran aviso a la seguridad privada.
"Le pusieron la pistola en la cabeza a mi mamá. No les pegaron mucho, sólo algunas cachetadas. Pedían plata, joya y armas", contó a este medio la hija de uno de los damnificados. Tras permanecer durante más de dos horas dentro de la casa, los delincuentes querían escapar arriba de la camioneta de una de las víctimas, aunque se encontraron con el impedimento que no tenía el suficiente combustible. Al desistieron de la maniobra, por consejo también de una vecina para evitar que la seguridad advirtiera su presencia, a cambio los llevó hasta la zona del campo de polo. En ese lugar, aguardaba una camioneta en la que cargaron todo los objetos delincuentes, para escapar del lugar. La pesadilla finalizó cerca de las 4.30 de la madrugada.