Preocupación en El Quinto ante el hallazgo de restos óseos

Martes//Desde la semana pasada, perros encuentran huesos que, según vecinos, pertenecerían a una persona. Policía Científica estuvo en el lugar y se llevó las piezas óseas para determinar su origen. Una persona del barrio mostró fotos de lo que parece ser una extremidad.

Desde la semana pasada, vecinos de un sector del barrio El Quinto no salen del estupor ante el hallazgo de huesos que, aseguran, se trata de restos humanos. Enrique Agustín Pereyra, residente en San Lorenzo al 700 entre San Sebastián y San Roque, se acercó a esta redacción para contar lo ocurrido y aportar material fotográfico tomado en la puerta de su casa cuando una perra galgo de su propiedad y otro perro de un vecino aparecieron con huesos correspondientes a una extremidad, otras piezas presuntamente compatibles con una pelvis y parte de un maxilar que sería de una persona.
Pereyra contó a EL CIVISMO que el asombro y la preocupación se produjeron cuando observó que los perros tras haber excavado un pozo, habían dejado "un brazo de una persona" que acababan de traer hasta la casa desde una zona de terrenos baldíos donde suele arrojarse todo tipo de residuos en forma clandestina.
Ante lo que acababa de ver, el vecino tomó fotos con su teléfono celular y llamó al 911 por entender que estaba en presencia de algo fuera de lo común. "Los huesos tienen pegada carne", detalló. "Di el aviso a la Policía porque jamás en mi vida me pasó algo igual", dijo, y agregó que los perros llevaron hasta su jardín otros huesos.
La Policía Científica se hizo presente en el domicilio, recogió los huesos para determinar su origen y a primera vista un forense les dijo a los vecinos presentes que se trataba de huesos de perros. Desde entonces, en el barrio es el tema de conversación excluyente entre los vecinos que no creen en esta versión preliminar de los especialistas.
Saber con exactitud el lugar donde los perros encontraron los huesos aparece como una tarea pendiente. Pereyra sospecha que proviene de uno de los tantos lotes abandonados que hay cerca de su domicilio. "Hay varios baldíos al costado de callejón. Ahí tiran basura, perros muertos, la Municipalidad no limpia nada, no se sabe nada lo que hay", agregó.

MONTÓN DE HUESOS
"El martes alrededor de las dos de la tarde trajeron una bufanda con los huesos que sería de una cadera. Estas vértebras son humanas", aseveró, y se terminó de convencer que esos huesos no serían de un animal cuando un tío que es radiólogo le aseguró que los restos son humanos. "Mi tío vio los huesos y dijo que son de una persona joven de entre 20 y 25 años", precisó.
Pero además de los perros, un vecino de Pereyra encontró en su casa "un maxilar completo con todas las muelas" al tiempo que denunció el olor nauseabundo que hay en la zona de baldíos delimitada por la avenida José María Pérez, calles San Lorenzo, San Roque y San Sebastián, aunque en un terreno más grande que hay detrás de una casa quinta también provienen malos olores que ahora despiertan la sospecha de los vecinos. "Olor todavía queda. Hace tres meses era infernal el olor a podrido que había pero de perro (muerto) no es seguro".
Pereyra esperaba que la Policía al menos acordonara la zona y rastrillara el lugar para encontrar más evidencias como así también el lugar exacto donde los perros encontraron las piezas óseas. Sin embargo, ello no ocurrió. Tampoco confían en la presunción de un forense que llegó al barrio. "El nene mío está traumado y desde hace tres días no duerme; al nene del vecino le pasa lo mismo. Lo único que falta es que (los perros) traigan la cabeza o un pedazo de pierna. Quiero que venga un fiscal y que la Policía vuelva y rastrille el lugar porque desde el domingo no hicieron más nada. Ayer (por el miércoles) los perros siguieron trayendo más huesos y el barrio está asustado".