Luces y sombras a un mes de la creación del Comando de Prevención

Miércoles//El nuevo cuerpo de la Policía realizó unas 50 intervenciones en 30 días. En paralelo, se registró una importante cantidad de ilícitos en distintos puntos del distrito, en particular asaltos sumamente violentos.

"Para fin de año los vecinos de la provincia de Buenos Aires van a ver cambios realmente sustanciales e importantes". La frase pertenece al ministro de Seguridad, Alejandro Granados, en ocasión de la inauguración del Comando de Prevención Comunitario de Luján el pasado 18 de junio. Todavía quedan seis meses para que se haga realidad. Por ahora, la seguridad continúa siendo una deuda pendiente. A un mes de la puesta en marcha del CPC, los resultados de la nueva unidad policial parecen estar lejos de llevar tranquilidad a la población.
A 30 días de salir a las calles el CPC lleva reportado casi medio centenar de intervenciones. En ese tiempo, informó la aprehensión de 48 personas. Para más detalles, 15 detenciones fueron de sujetos atrapados "in fraganti" o a los pocos minutos de haber cometido un delito, cumpliendo de ese modo con el objetivo por el cual fue creada y concebida la estructura policial.
Una docena de personas fueron arrestadas por causar desórdenes en la vía pública, seis por robar motos o circular en motos robadas que tenían vigente pedido de secuestro, siete lograron ser recapturados, tres individuos quedaron comprometidos por andar armados y no poder justificarlo –entre ellos un delincuente que abrió fuego contra el personal policial la semana pasada-, tres eran "mecheros", uno cayó por estafar al vender bonos falsos en Pueblo Nuevo y otro por abusar de su sobrino menor de edad.
Como contrapartida, en este primer mes de vida del CPC se conocieron una serie de episodios delictivos que mantienen preocupada a buena parte de la población. Por ejemplo: a las 48 horas del corte de cinta que habilitaba el Comando, se produjo el primer golpe protagonizado por la llamada "Banda del Toyota blanco". En los sucesivos días, se conocieron tres casos más.
Otra gavilla que se traslada en otro auto volvió a asestar otro golpe. En ese caso se trata de la "Banda del Bora negro", sospechada por estar involucrada en golpes tipo comando contra firmas comerciales y posiblemente de haber perpetrado un violento asalto con un botín millonario contra un anciano. En el barrio San Juan de Dios, vecinos debieron convocar a los jefes de la Policía Distrital y del Comando ante una seguidilla de robos cometidos en un lapso de pocos días. Hasta ahora no hubo detenidos y los hechos no cesaron.
No habían pasado 10 días de la visita del ministro Granados, cuando salieron a luz una sucesión de atracos en pequeños comercios de diversos barrios. En muchos, hubo tiros. Este comportamiento de los delincuentes que hasta entonces era poco frecuente, se intensificó en los días posteriores. A tal punto, que ya se contabilizan seis episodios con estas características que dejó como saldo en uno de estos hechos a una mujer gravemente herida al recibir un disparo en el abdomen cuando ya le había entregado hasta las monedas que tenía en la pollería que atendía en barrio Lanusse.

DELICADA SITUACIÓN
Entre los robos que llegan a tomar estado público, hay también instituciones afectadas como la Escuela Normal y la Villa San José de los Hermanos Maristas, adonde entraron a robar y a pesar de las presunciones respecto a los autores sigue sin haber novedad alguna referida al esclarecimiento de este último hecho.
No muy lejos de ahí, un vecino fue objeto de todo tipo de torturas por parte de delincuentes que entraron a su casa a robar. A las pocas cuadras, este último fin de semana vecinos dijeron haber escuchado varias ráfagas de tiros al tiempo que señalaron no ver la presencia policial recorriendo las calles como debería ser.
Barrios como Luna, Juan XXIII o Las Casuarinas son también blanco de la delincuencia. Casas desvalijadas con o sin moradores, arrebatos en la vía pública, "motochorros" imparables a toda hora y en cualquier punto de la ciudad ponen en jaque a los vecinos y hacen dudar de la efectividad del Comando de Prevención Comunitaria.
El panorama es preocupante y así lo hicieron saber algunos de los integrantes del Consejo de Seguridad Ciudadana en la última reunión abierta en la que quedó definido el reglamento interno.
El jefe del CPC Luján, en cierta medida, admite falencias y de esa forma no puede dar una respuesta acorde a la situación. Con el distrito dividido en 11 zonas más 3 móviles de refuerzo, el comisario Nelson Petraglia reconoció que los recursos con que cuenta en la actualidad son insuficientes. "Se está trabajando las 24 horas en hacer prevención" pero "sé que no estamos trabajando de la manera ideal ya que hay zonas como la 1, 3 y 4 que están cubiertas con un solo patrullero cuando necesitamos por los menos tres móviles por zona para reforzarla. Como quien dice: estamos seis móviles abajo y estamos esperando que egresen los cadetes de la Policía para reforzar las comisarías, destacamentos y este comando", dijo recientemente a Prensa de la Municipalidad de Luján.