Tres intentos de robo en 20 días en una inmobiliaria de Las Heras al 600

Viernes//Primero dos jóvenes con una masa quisieron abrir la puerta y romper los vidrios. Después, cortaron un candando, rompieron un ventiluz pero sonó la alarma y se fueron. Al día siguiente, volvieron a entrar por una obra en construcción. En la inmobiliaria trabajan a puerta cerrada.

A sólo 300 metros en línea recta de la Comisaría Luján Primera, la firma Valeria Sosa Gestión Inmobiliaria y el edificio contiguo que está en fase de construcción fueron blanco de tres intentos de robo en los últimos 20 días.
A la 1.30 de este miércoles, dos jóvenes quisieron entrar a la inmobiliaria pero no pudieron. Con una masa aplicaron tres fuertes golpes contra el marco de la puerta y los vidrios laminados. Al ver que la estructura no cedió, se fueron tan pronto como llegaron. Las imágenes quedaron almacenadas en el sistema de video que posee la inmobiliaria. Un vecino de la cuadra llegó a oír tres golpes extraños y alcanzó a dar aviso al dueño del inmueble que esta vez optó por no alertar a la Policía tras una mala experiencia que tuvo luego de sufrir un asalto. "La vez que me robaron tenía las imágenes y me dijeron en la Policía que no haga la denuncia porque eran peligrosos. Ahora tomé otras medidas", señaló.
Rubén Mónaco relató a EL CIVISMO Digital este hecho como dos episodios más ocurridos en las últimas semanas. Un martes, también a las 1.30 de la madrugada, cortaron el candado, entraron por la obra y quisieron ingresar a la inmobiliaria por un ventiluz al que llegaron a destrozar. Así, accedieron a un baño aunque tampoco lograron el objetivo ya que la firma comercial cuenta con sistema de alarma que se activó al primer movimiento.
No obstante, al día siguiente nuevamente desconocidos violentaron el candando, volvieron a entrar a la obra pero en este caso dejaron una escalera sobre un tapial que comunica a una propiedad vecina.
"Parece mentira: vinieron (a robar) el martes y el miércoles. Entraron a las 1.30 pero hasta las 4 no salieron. Voy a poner un reflector porque no hay buena iluminación en la calle. Después que me robaron la primera vez tuve que poner una persona de seguridad por un tiempo. Un comisario conocido me dijo que los chorros que me asaltaron eran profesionales. Ahora, no manejo más plata y tengo la puerta cerrada. Al que conozco le abro porque ya no es por lo que te pueden robar sino que no se sabe cómo te vienen a robar", agregó Mónaco.