El yoga es una limpieza interior

Celebremos la vida que crece, la vida que continuamente cambia y se renueva, la inspiración creativa que nos enamora. El yoga se trata en últimas de hacer una limpieza mental para liberarnos de equipajes innecesarios y recuperar la sencillez que nos permite fluir libremente y bailar con ella.

Osho dijo alguna vez, "la vida no debe sólo ser vivida. ¡Debe ser celebrada!" Celebremos la vida que crece, la vida que continuamente cambia y se renueva, la inspiración creativa que nos enamora. El yoga se trata en últimas de hacer una limpieza mental para liberarnos de equipajes innecesarios y recuperar la sencillez que nos permite fluir libremente y bailar con ella. Todo lo que hacemos en yoga nos hace crecer, sí, pero esencialmente nos limpia de pensamientos, viejas creencias y comportamientos para que podamos ver lo que ya somos y ya sabemos. Nos permite soltar para realmente estar con la mirada fresca, aquí y ahora.
El verdadero valor del yoga es que nos enseña el camino de autoconocimiento, conciencia y sanación. Se dice que nuestra mente es como un gran lago, profundo e infinito, alterado siempre por ondas de pensamiento. El yoga en losYoga Sutras ha sido definido como "calmar las fluctuaciones de la mente". Sólo cuando, a través de un sistema holístico, finalmente está quieta, podemos ver el fondo. Allí es cuando nuestro ser está en armonía y estamos en contacto con nuestro espíritu. No solo estamos en paz y con una salud radiante: la vida nos maravilla. Estamos plenos. Estamos en estado de yoga.
Muchas personas pensamos que el yoga nos da mucho, pero en realidad nos ayuda a despojarnos de lo que no es nuestro. Cuando estamos en equilibrio y limpios de cuerpo, pensamientos, creencias, nos encontramos con nuestra esencia: felicidad pura. Este momento mágico de crecimiento y renovación es el propicio para hacer una limpieza a profundidad de nuestro espacio vital. El propósito es dejar ir elementos innecesarios, repensar cómo queremos vivir y permitir la renovación de las energías en un lugar preparado con amor. Todo esto es simbólico de lo que pasa en nuestra mente.
El yoga es unión, porque establece una unidad entre nuestro ser físico, mental y espiritual y con todo lo que nos rodea. Como forma de vida es todo un sistema para el desarrollo de cada aspecto de nuestro ser, buscar la dicha y la liberación ante nuestra propia mente que nos impide ver con claridad. Hay diferentes caminos en el yoga, pero el más conocido es el Raja yoga, el yoga real. Es el yoga del control de la mente. Cada uno de los ocho pasos de los Yoga Sutras llevan a este propósito. Es un asombroso documento de psicología antigua.
Por esto, los momentos de cambio de estación (en especial del invierno a la primavera) o inicios de ciclos astrológicos son los más adecuados para soltar dar inicio a nuevos ciclos, incorporar a diario la filosofía del yoga, refrendar propósitos, retomar prácticas de salud holística, llenarnos de prana y salud, cambiar hábitos de vida y pensamiento que de una manera u otra impidan nuestro bienestar. Es lo que llamo una limpieza mental.
Es muy simbólico que el yoga nos haga más flexibles, pues una de sus principales enseñanzas es la flexibilidad que nos prepara a abrirnos espiritualmente. Una verdadera transformación implica pensamiento positivo, querernos y honraros, confiar, asumir la responsabilidad de la propia experiencia, tomar decisiones que nos permitan expandirnos, aprender a entregar, vivir el presente y aceptar los cambios que trae la vida. El yoga nos enseña a estar en armonía pero es más que esto: al mismo tiempo es un camino hacia el amor. El amor es el valor mayor porque es ahí donde podemos ser verdaderamente libres, éticos y felices.
El yoga, como sistema que parte de la unión entre el cuerpo, la mente y el universo, aborda cada uno de los aspectos que nos conforman. Se cree que cuando vivimos en equilibrio interior nos conectamos con nuestro espíritu. Empezamos a encontrar lecciones y maestros que no son más que un reflejo de nuestra propia sabiduría. Para esto debemos despojarnos de creencias, comportamientos, estímulos, toxinas. Saber que podemos decidir ser sanos y felices si nos liberamos de lo que nos impide ver la realidad.
La limpieza mental a la que nos lleva el yoga implica "descontaminarnos", liberarnos y soltar para simplemente "ser". También es permitir que sea, la vida sea. Sin resistencia. Es regresar a lo más simple, donde está la salud y la felicidad sin condiciones. Sin embargo, cualquier momento es propicio para retomar el camino de limpieza mental, hacia la liberación. Por eso se dice que el yoga comienza "ahora".