“Me gustaría, más adelante, regresar a la Argentina”

Fundada en la parte septentrional de la Península de Yucatán, en México, sobre vestigios de un antiguo asentamiento maya conocido como Ichcaanziho, se localiza la ciudad de Mérida. Con sus arraigadas tradiciones, hace 14 años que es el sitio donde vive la lujanense Virginia Prieto.
Estudió Historia en la Universidad Nacional de Luján. Se recibió y comenzó a trabajar de profesora en varias escuelas de Luján, Open Door y Torres. "Me encanta la docencia. Siempre me gustó la Historia y la Antropología", contó Virginia.
Obtuvo una beca del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) del gobierno mexicano para estudiar la Licenciatura en Antropología Social en la Universidad Autónoma de Yucatán. Luego, aplicó para becas de posgrado y la beneficiaron para estudiar la maestría y el doctorado en el CIESAS (Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social).
"Ya concluí los estudios de doctorado y ahora estoy trabajando en investigación antropológica. Mis temas son "Educación y cultura maya", entre otros", explicó.
En la actualidad trabaja en un Centro de Investigación y, parte de su labor, es salir con sus compañeros a realizar tareas de campo con poblaciones mayas en el interior del estado.
Acerca de Mérida, la ciudad donde vive, aseguró que "es un sitio muy tranquilo. Una ciudad bella, con mucho turismo todo el año, por ser la capital del mundo maya. La seguridad, la tranquilidad y la amabilidad de su gente, son algunas de las cosas que me gustan mucho".
"Con respecto al clima, todo un tema", afirmó. "Aquí dicen que en Mérida hay dos estaciones: el verano y la estación de tren. El clima es intensamente caluroso casi todo el año ya que en invierno la temperatura promedio es de 27 grados, y en verano supera los 40 todos los días".
Sin embargo, hay solución. Una bella solución: a media hora de la ciudad se encuentra la costa del golfo de México y el bello Puerto de Progreso, con un mar templado y transparente. "Y a tres horas de la ciudad se encuentran Cancún y la Riviera Maya, destino preferido para vacacionar", indicó.
- ¿Qué extrañás?
- "De Argentina extraño mucho, pero procuro viajar todos los años. ¡Extraño a mi mamá, a mi familia, a mis amigos! Extraño los ¡asados! de los domingos y el mate compartido entre amigos. Acá a mis amigos no les gusta el mate. También extraño los ravioles de mamá y las comidas de la tía. La familia es lo que más se extraña".
También añora ciertas cosas de Luján. "Cada vez que la visito, la encuentro bella y cambiada. Extraño las caminatas, en otoño, por el parque San Martín, cercano a mi casa en el barrio San Bernardo, entre muchas otras cosas".
Virginia dijo que está "enterada de lo que sucede en el país y en la ciudad, porque leo los diarios en internet, escucho radios y veo tele. Y de corazón espero que la situación mejore cada día y se reconstruya, especialmente, la seguridad. Argentina tiene todo para salir adelante".
Desde México, se comunica con su familia y en particular con su mamá a través de skype o por teléfono. "Estamos lejos físicamente, pero siempre cerca desde el corazón y los afectos. Mis amigas también están siempre".
- ¿Cuáles son tus proyectos?
- "Con respecto a mis proyectos, me gustaría más adelante regresar a Argentina y poder trabajar de lo que he estudiado allá y aquí durante tanto tiempo. Sin embargo, no he tenido ofertas laborales que me permitan reincorporarme. Sí me gustaría regresar, pero por ahora no están las posibilidades concretas. En el año 2011 estuve dando unas conferencias en la Universidad de Luján, pero más allá de eso, no se logró nada".