En la familia, las miradas se posan sobre el padre del joven muerto en Torres

Jueves//La madre, hermanas y familiares de Juan Carlos Moisés, el muchacho baleado por su madrastra en Torres, culpan del hecho al padre. Entre otras cosas, lo califican de “usurero” y piden que se investigue su patrimonio. Aseguraron que el hombre y su pareja vivían con miedo.

Carlos Moisés –"El Turco" o "Carlota"- tiene siete hijos. Cinco de un primer matrimonio –entre ellos Juan Carlos, el único varón entre cuatro mujeres- y dos con su segunda pareja María de los Ángeles Mariño, autora del disparo en la cabeza que terminó con la vida del joven tras permanecer una semana en terapia intensiva. "Carlitos", como todos llamaban al joven de 23 años, era a su vez padre de una nena de 3 años.
Las hermanas dijeron que Carlitos adoraba a su padre con quien trabajaba en el campo "La Criolla" criando cerdos, uno de los pasatiempos de Carlos "El Turco" Moisés. Pero esa muestra de afecto permanente que le dispensaba a su progenitor, no parece haber sido retribuida por su papá quien desde que ocurrió el episodio en la puerta de la casa de Capitán Hernández 544, en la localidad de Torres, recién el viernes se acercó al Hospital Municipal para interiorizarse por la suerte que había corrido su hijo.
Este comportamiento, que no pasó por alto incluso para las autoridades policiales, a las hermanas e hijas de Moisés no les llamó la atención. Dicen que lo que le pasó a su hermano es consecuencia de las actividades comerciales que realiza su padre. "Toda la vida anduvo en lo mismo: haciendo chanchuyos", aseveraron.
Los "chanchuyos" a los que se refiere parte de la familia tendrían que ver con la actividad de prestamista que desarrollaría de manera paralela a su trabajo como empleado en Montes de Oca. "En Torres, le prestó plata al 80 por ciento del pueblo", graficó un allegado.
Pero más que prestar dinero, directamente lo califican a Moisés como "usurero" y revelaron que suele cobrarse las deudas de manera poco amistosa. Asimismo, contaron que tiene varios vehículos pero afirmaron que no estarían a su nombre.
Silvia, su primera esposa, dijo que su marido adeuda "300 mil pesos" de cuota alimentaria de la menor de sus hijas que hoy tiene 15 años y es diabética. "Es un sinvergüenza teniendo todos los vehículos que tiene afuera (de la casa). No puede ser que la AFIP no lo agarre", denunció.
Los familiares desmintieron de manera tajante que Moisés se gane la vida como un pequeño productor pecuario dedicado a la crianza y venta de porcinos. "Él es usurero. Esa es la palabra. Le saca las tarjetas de débito a la gente cuando le da la plata y yo tengo hasta los papeles firmados por un juez y un fiscal", enfatizó su ex mujer como para que no queden dudas.
Para la familia, el hecho ocurrido la semana pasada no se trata de una "entradera" más. "Ya lo venían siguiendo", dijo su primera mujer y agregó en este mismo sentido haber sufrido varias "entraderas" cuando vivían en la Colonia Montes de Oca. "Una vez fue como un golpe comando, estaban todos vestidos de negro", recordaron las hijas.

ATEMORIZADOS
El balazo que recibió "Carlitos" produjo un quiebre en la familia. La madre, las hermanas y los pariente que más quieren al muchacho exigen que se sepa la verdad respecto a "El Turco" Moisés, un hombre con pasado y presente polémico.
"Antes de que pasara esto, los delincuente pasaron por mi casa. Los vi: iban en una Toyota blanca", dijo una de las hermanas que reside en Torres, a una cuadra de Ruta 192. "Esto era para mi papá", indicó a EL CIVISMO.
Otra de las hermanas contó que su padre y su pareja habían extremado las medidas de seguridad de manera desproporcionada. "Últimamente, ella estaba aterrorizada. No sabía lo que hacía. Vivía con miedo. Se alternaban hasta para dormir. Una familia normal no vive así", expresó en la puerta de terapia mientras aguardaban uno de los últimos partes médico.
Ese temor que describió la familia, lo habría llevado a Moisés a tener que colocar varias cámaras de seguridad. Dos por lo menos apuntaban hacia el exterior, pero adentro de la vivienda aseguran que puso varias más. Además de la Glock 45, afirman que tiene más armas en el interior de la propiedad. Como si fuera poco, había hecho levantar paredones. "No dormía de noche del miedo que tenía. Dormía de día  y se quedaba despierto a la madrugada mientras su mujer dormía", agregaron las hijas.
Al jefe de la Departamental Luján-General Rodríguez, comisario mayor Fabián Perrone, también le llamó poderosamente la atención las medidas de seguridad con que cuenta la casa. "Torres es un pueblo donde todos se conocen y donde todavía pueden descansar con la puerta abierta" pero "obviamente tenía excesivas medidas de seguridad para las características del pueblo" sostuvo, al tiempo que informó que "hay un hecho denunciado hace una semana por el hombre que dijo que le querían entrar a la casa por los techos. Eso fue denunciado en el Destacamento de Torres y se está investigando".
En este aspecto, una de las hermanas detalló que la Toyota blanca con los sujetos ahora sospechados de estar detrás del atraco que comenzó en el campo, había sido vista en varias oportunidades circulando por el pueblo al menos en la última semana. Los sospechosos simularon estar interesados en la compra de cerdos en el campo de Moisés y hasta preguntaron en algunos comercios por "El Turco". El intento de entrar a la casa una semana antes, habría sido obra de los mismos individuos que actuaron ese miércoles.
"De tanto ir y venir, (los delincuentes) hicieron un camino en el lote del fondo de la casa y cortaron el alambrado. Envenenaron a una perra con estricnina que era muy centinela. Se treparon por el paredón de la casa de la vecina. Llevaban dos tablas para pisar el techo y fueron a la habitación de atrás, quisieron abrir una reja pero no pudieron. Al entrar, empezó a sonar la alarma. Ahí, ellos (por su papá y la pareja) se levantaron y empezaron a tirar tiros. Los vecinos vieron cuando se estaban escapando (los delincuentes)", detalló otra de las hijas, aunque no puede saber el motivo por el cual una banda de malvivientes venía intentando desde hacía un tiempo cometer un ilícito contra su padre.

BAJO SOSPECHA
Finalmente la banda pudo dar con "Carlota" Moisés en el campo ubicado entre Torres y Paradas Robles. En el lugar, ahora se supo, estaba el casero con su familia. Al llegar Juan Carlos y ver lo que estaba pasando, habría intentado escapar corriendo, pero los delincuentes lo capturaron, lo subieron a la Chevrolet S10 del padre y se lo llevaron al pueblo. 
En la granja, tanto Moisés padre como el matrimonio de caseros fueron atados y golpeados. "Cuando Carlitos salió corriendo, uno le dijo a otro: ¡Atrapalo, atrapalo! A la casera le pegaron, hasta le sacaron los dientes", contó una de las hermanas del muchacho muerto.
Para los familiares, la clave de todo pasa por desentrañar la manera que hizo para tener el capital que había logrado acumular. Coincidieron en señalar que nunca lo pudo haber conseguido con un sueldo de empleado público en la Colonia Montes de Oca, ni con los alquileres de las propiedades que posee en la localidad y menos con la venta de cerdos. Para ellos, cuanto menos, es fruto de la actividad de "usurero".   
Respecto a Moisés, el comisario mayor Perrone expresó que "está fehacientemente determinado" que es empleado y tenía una granja. Al ser consultado acerca de la actividad de prestamista y su posible relación con el hecho, el comisario mayor sostuvo: "No se descarta nada y más en las primeras horas de la investigación" pero "hay elementos y pormenores que no los voy a ventilar para obtener el esclarecimiento total de este hecho".
Mientras tanto, surgen numerosas preguntas que esperan tener respuestas. ¿Por qué los delincuentes llevaron al hijo hasta la casa de su padre en Torres y dejaron al hombre en el campo? ¿Por qué la pareja tiró en lugar de encerrarse en la casa y llamar a la Policía? ¿Habría tenido la misma reacción si en lugar del hijo de su pareja hubiese estado alguno de sus hijos biológicos o incluso su pareja? ¿Hay otro móvil que no sea sólo robo para que Carlos Moisés haya sido víctima de dos golpes tipo comando en 8 años o es pura casualidad?
En tanto, Silvia, la mamá de Juan Carlos Moisés, sentenció: "Voy a luchar para que esto se esclarezca. Esto no va a quedar así. Porque no es justo que por las chanchadas de él hoy pague Carlitos y mañana pueda ser una de mis hijas".