Luján, con altos niveles de arsénico en agua

Así lo refleja un documento del Instituto de Efectividad Clínica y Sanitaria (IECS). La principal contaminación se da en el agua de pozos, aunque la red pública también está por encima de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud.

Los niveles de arsénico en el agua en el Partido de Luján se encuentran por encima de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). El dato se desprende de un documento difundido por el Instituto de Efectividad Clínica y Sanitaria (IECS).

El principal inconveniente en nuestro distrito se registra en el agua de pozos, donde –según el informe- se encuentra entre el 10,01 y 50.00 miligramos por litro (la OMS aconseja que no supere el 0,01 miligramos por litro). En tanto, en la red de agua corriente los niveles van del 0,00 al 10,00 miligramos por litro.

En toda la provincia de Buenos Aires hay al menos 50 localidades con niveles de arsénico en el agua por encima de los 0,01 miligramos, de acuerdo con los resultados de la primera revisión de investigaciones y registros de los últimos 15 años. En esos documentos del Instituto de Efectividad Clínica y Sanitaria, el 87 por ciento de las muestras obtenidas en municipios bonaerenses en ese período superaban los valores seguros para la población. Y si se toma todo el país, se calcula que uno de cada diez argentinos vive en una zona donde el agua está contaminada con arsénico y su consumo en el tiempo puede causarle enfermedades, como cáncer, anemia o problemas de la piel. 

Dentro de la lista que incluye a unos 50 partidos, hay localidades más comprometidas. De hecho, el equipo que hizo el análisis afirma que “la mayor parte del agua de la corteza terrestre de la provincia de Buenos Aires supera el límite de 10 mcg/l (0,01 mg/l) con lo que no es apta para el consumo”. En ese contexto, hay concentraciones mayores a los 100 mcg/l en la zona de Suipacha y Navarro. En tanto, otros distritos como Pehuajó, Casares, 9 de Julio, 25 de Mayo, Saladillo, Las Flores, Bolívar y Pergamino, tienen niveles que superan los 50 mcg/l. 

Entre las ciudades del interior que fueron reveladas en el estudio, también están Adolfo Alsina, Coronel Suárez, Olavarría, Azul, Tapalqué, Roque Pérez, Lobos, Navarro, Cañuelas, Las Heras, Marcos Paz, General Rodríguez, Luján, Exaltación de la Cruz, Zárate, Campana, Baradero, Lincoln, Pinto, Junín, General Viamonte, Bragado, Alberti, Chivilcoy, Suipacha, Chacabuco, Salto, Benito Juárez, Gonzales Chaves, Lobería, Punta Indio y La Plata. En tanto, hay otras catorce del Conurbano también con datos preocupantes de arsénico: Pilar, José C. Paz, Moreno, Merlo, La Matanza, Ezeiza, Escobar, Tigre, Malvinas, San Isidro, Vicente López, Tres de Febrero, Berazategui y Florencio Varela. 

El arsénico es un químico tóxico cuya ingesta prolongada puede derivar en una enfermedad grave denominada Hidroarsenicismo Crónico Regional Endémico (Hacre). Según el Consejo Federal de Entidades de Servicios Sanitarios (Cofes), el Hacre en personas expuestas y susceptibles aumenta el riesgo de padecer alteraciones cardíacas, vasculares y neurológicas, lesiones hepáticas, renales y cutáneas, y repercusiones en el aparato respiratorio. Los trastornos característicos son el engrosamiento de la piel de las palmas y plantas, y la aparición de cáncer cutáneo, de pulmón y de laringe.