El lunes personal educativo se encontró con el kiosco desvalijado. Por tercer fin de semana seguido, hubo un robo en el establecimiento educativo. Autoridades escolares y municipales, este martes trataron este asunto.
Personal docente de la Escuela 24 de Pueblo Nuevo se comunicaron el lunes pasado con EL CIVISMO para informar que, una vez más, ladrones ingresaron a robar a sus instalaciones durante el fin de semana. Fue el último hecho de una saga que lleva contabilizados varios episodios similares desde hace aproximadamente un mes.
Ese mismo lunes, la secretaria de establecimiento educativo ubicado en Tropero Moreira y Estrada se acercó al Destacamento Policial de Pueblo Nuevo para dejar asentada una nueva denuncia. El encargado de la repartición señaló a este medio que “en el transcurso del mes hubo otras tres denuncias” y deslizó que los autores de estos hechos, donde se mezcla el raterismo y el vandalismo, no se serían ajenos a los alumnos de la propia escuela.
Los ilícitos, que generan preocupación e indignación en la comunidad educativa, ocurren generalmente por la noche, cuando en el lugar no queda nadie. La falta de un sistema de seguridad -como alarma, cámara o luces- más un tapial de 1,20 metros que no parece ser obstáculo para poder ingresar, facilitan la tarea de los malhechores.
Para el principal Roldán, se trataría de chicos que esperan el momento para entrar a robar después que pasa el patrullero en sus habituales recorridas, en una jurisdicción extensa que abarca varios kilómetros a la redonda.
Este fin de semana el robo fue en el kiosco, de donde se llevaron golosinas tras forzar una reja. “Ya reforzamos las recorridas”, anunció el encargado del Destacamento. La medida se aplica en una franja horaria determinada, cuando se sospecha que los ladrones entran a la escuela a robar.
Por su parte la secretaria de la escuela, Lilian Vanini, contó por Radio Líder que “estamos muy tristes, porque en el transcurso de un mes hemos tenido tres episodios de robo en nuestra escuela”, en tanto detalló que todos los robos sucedieron los fines de semana.
“El primer episodio ocurrió hace aproximadamente un mes, cuando ingresaron a robar y rompieron dos vidrios de los salones. El segundo episodio ocurrió hace 15 días, cuando también ingresaron por el sector del CEF, entraron a la sala de maestros, rompieron vidrios e ingresaron al kiosco, y este lunes, cuando entramos a la escuela y descubrimos que habían entrado otra vez al kiosco, rompiendo el candado y la reja”, relató la docente.
La sucesión de estos episodios de inseguridad sin freno ni solución, es motivo de angustia entre directivos y educadores. “Estamos totalmente afligidos porque vemos que esto se reitera y no tenemos ninguna solución hasta el momento. Estamos muy triste”, dijo Vanini por la 97.7 Mhz de la FM.
Este martes, desde la Escuela indicaron que el tema estaba siendo analizado en la Secretaría de Seguridad del Municipio y se dio intervención al Consejo Escolar. Pero no pudieron brindar mayores detalles ni realizar declaraciones por pedido de una inspectora que no autoriza a los docentes a contar la problemática a los medios de comunicación.
Una posibilidad que manejan las autoridades es colocar cámaras de seguridad y/o una alarma. Mientras tanto, la secretaría Vanini comentó que “aparentemente esta situación es inmanejable porque hasta el momento no tenemos solución”.