Festejo por los 100 años de Biblioteca Jean Jaurés

El acto se realizó el jueves por la tarde frente al edificio de calle Lavalle. Se reconoció a los bibliotecarios y a los socios lectores Nelba Aimale, Rodolfo Pérez, y Marta Bruno.

Cien años celebró este 29 de marzo la Biblioteca Jean Jaurés. Fundada bajo principios de educación y trabajo, la institución conserva los ideales socialistas que la vieron nacer. El actual edificio inaugurado en 1927, fue construido con el esfuerzo de sus fundadores. Las dos clausuras que sufrió el centro cultural reforzaron la voluntad de muchos socios quienes cuidaron a sol y a sombra el espacio. Hoy, la Comisión Directiva apostó a un cambio y entre ello a la renovación generacional. Así lo mencionó su presidente, Elma Villarreal. El acto organizado como parte de esta celebración, motivó la muestra de las actividades que renovaron el perfil cultural de la biblioteca mas no sus ideales. El profesor Fernando Herrera interpretó el Himno Nacional y Xoana Espil, docente de guitarra, cerró el festejo con una presentación musical junto a sus alumnos.

“Un grupo de hombres con ideales vio la necesidad de crear un espacio cultural. Si bien comenzaron en distintos locales, la idea del edificio propio era cada vez más intensa, y se embarcaron en la construcción del nuevo y definitivo edificio. Santiago Mileo hipotecó su casa para pagar el crédito bancario”, se leyó al inicio del evento celebrado en la calle, frente a la casa donde funciona la biblioteca.

Una de las personas que creció junto a la institución es Esther “Gucha” Mileo, hija de Santiago, uno de los fundadores. Su dedicatoria y homenaje a la “querida biblioteca” consistió en una carta que leyó ante la admiración de todos.  

“Esta carta es para vos querida biblioteca. Hoy tenés 100 años. ¡Quién pudiera cumplirlos y tan hermosa cómo estás! Lo que menos imaginé es que te pudiera escribir en tu centenario a pesar de tantos años. Sabés bien lo que siento por vos. Desde que era muy niña papá me enseñó a quererte mucho. Por eso hoy mis hijos, nietos, se sienten orgullosos de vos, al conocer tu verdadera historia. ¿Te acordás cuando íbamos mi hermana y yo todos los días a visitarte de la mano de papá? ¿Te acordás cuando Juan Cortada preparaba el café en la cocina y nos hacía llevar con cuidado la bandeja para servir el pocillo a los lectores que te visitaban?

“De alguna manera hemos caminado juntos. Vos eras mucho mayor que yo, no muchos años. Así aún hoy siento el perfume del pequeño jardín, del rosal blanco, del aire fresco del patio, del silencio respetuoso del salón de lectura, del olorcito a café en esas tardes frescas de otoño”, cerró.

Como a Gucha, la emoción también alcanzó a Raúl Rodolfo y Mario Yelpo, socios más antiguos de la entidad, y a Elma Villarreal cuyas palabras agradecieron a todos los que en el último tramo de estos cien años acompañaron la labor dentro de la biblioteca. “Hace ya mucho tiempo venimos recorriendo el camino del centenario. En este andar rescatamos historias, testimonios, fotos, documentos. Pudimos valorar el espíritu de los fundadores, gente de trabajo, obreros, artesanos, que compartieron ideales socialistas y se entusiasmaron con la idea de organizar una biblioteca partidaria”, señaló.

La presidente de la Comisión Directiva retrató en su discurso la historia de la institución y recordó que hace dos años les fue entregado el árbol genealógico de Jean Jaurés, asesinado en 1914, “donde se observa la relación vía materna con el padre Salvaire”. En homenaje al político socialista y pacifista francés, un estudiante de Francia que llegó a Luján por medio de un programa de intercambio, interpretó la canción del cantautor belga Jacques Brel, Jaurés.