J&F Group inauguró su nueva casa central

El nuevo local está ubicado en la avenida Fernández Beschtedt 379, a metros de Carlos Pellegrini.

En una noche de emociones compartidas, el viernes J&F Group inauguró sus nuevas oficinas, salón de exposición y ventas ubicadas estratégicamente en Fernández Beschtedt 379, a metros de Carlos Pellegrini.

Amigos, clientes, proveedores y familiares disfrutaron de un show de clowns y un ameno lunch mientras recorrían con admiración manifiesta la amplia, cómoda, moderna y funcional concesionaria multimarcas que, a esta altura, es toda una referencia en la venta de autos en la ciudad.

La flamante casa central consta de un espacioso salón de exhibición donde los clientes podrán apreciar los últimos modelos de Toyota, Renault, Volkswagen, Chevrolet y Peugeot, marcas que respaldan a J&F Group.

Además, las instalaciones cuentan con una recepción y varias oficinas repartidas en la planta baja y entrepiso destinadas a las operaciones comerciales. Todo está construido con delicados materiales prevaleciendo las superficies vidriadas. Hacia atrás hay un extenso patio prolijamente parquizado que finaliza en un sector para estacionamiento de vehículos.

La fuerte apuesta de J&F Group es el resultado de varios años de empeño y esfuerzo en el competitivo mercado automotor con un marcado crecimiento a partir de la comercialización de planes de ahorro. Esto llevó a la firma a posicionarse en un sitial de privilegio a poco de haberse radicado en Luján.

Reconocida por la seriedad y confianza dentro del rubro, J&G Group va por más pero siempre con la premisa de ofrecer al público una amplia gama de posibilidades para adquirir un 0km o el mejor de los usados, como pocos pueden ofrecer.

Al momento de decir unas palabras, Javier Sandroni –vendedor nato si lo hay- recordó la época que viajaba en tren junto a sus padres y miraba con asombro la habilidad que tenían los llamados “buscavidas”. Quizás, sin proponérselo en ese momento, se estaba gestando el empresario que actualmente es. “Yo era chico y los observaba. Para mí era un arte. Ver cómo se desenvolvían ante cada situación donde el vagón era su oficina”, dijo al evocar a sus “maestros” inspiradores. También repasó su etapa al formarse como vendedor de planes para Ford.

“Venimos andando un largo camino durante el cual fuimos tejiendo nuestra propia identidad. Empezamos con la comercialización de planes de ahorro lo que nos sirvió para delinear nuestro ADN de atención al cliente”, dijo al lado de Florencia, su inseparable compañera en la vida y clave en el crecimiento de la empresa.

“La familiaridad hace a la confianza, la calidez, la permanencia, la fidelidad: un sistema de retroalimentación constante en base al reconocimiento y a la recomendación”, sostuvo.

Con esta base de principios, Javier Sandroni no olvidó sus años en Pergamino donde cosechó amigos, consolidó vínculos familiares y ganó una valiosa experiencia que diez años después volcaría en Luján donde echó raíces para dar comienzo a una sólida realidad.

“Continuamos con los planes de ahorro y de esa forma generamos la necesidad de tener un lugar donde comercializar los autos que tomábamos de los clientes. Así fue que abrimos nuestro primer lugar en Humberto Primo. Ya no sólo comercializamos planes de Ford sino que empezamos a comercializar las marcas Peugeot, Renault, Chevrolet. La nueva agencia comenzó a funcionar”, resumió.

La casa fue quedando pequeña. “Surgió la necesidad de ofrecer otros servicios y atender al cliente como se merece, más personalizada, con un espacio más adaptado. Para construir hay que soñar, creer que se puede, estar convencido y, por último, hacerlo. Soñamos, nos imaginamos un lugar más amplio, con un salón de exposición donde se pueda mostrar el vehículo de forma cómoda, con una recepción y en un lugar de fácil acceso”, agregó.

“Estamos muy felices de encontrarnos en este lugar que para nosotros implica sacrificio, valor, oportunidad, futuro, felicidad, hogar”, sostuvo antes de agradecer a familiares, amigos y a todos los que hicieron posible la nueva agencia.

A diez años de aquel desembarco, la flamante casa central corona con este emprendimiento un nuevo logro. Al fin y al cabo, “ser quienes somos nos permitió haber llegado hasta acá”, dijo en un pasaje de su alocución Javier Sandroni, el padre de la criatura que ya camina sola y pisa firme llamada J&F Group.