Con la presencia de dos trabajadores, los ediles aprobaron por unanimidad una resolución solicitándole al Gobierno Nacional la convocatoria a "una mesa de diálogo sectorial urgente" para establecer un "plan de recuperación para la industria cerámica". Denuncian "dumping" en las importaciones.
La situación de industrias vinculadas a la construcción continúa agravándose ante la sostenida caída de las ventas y la consecuente suspensión de trabajadores. El caso que más alarma en nuestro distrito es el de Cerámica Cortines, una de las empresas locales con mayor generación de empleo.
Matías Cardoza y Gastón Servino, dos trabajadores de la empresa que se encuentran suspendidos, participaron de la sesión del Concejo Deliberante llevada a cabo el lunes pasado y volvieron a exponer la situación de angustia e incertidumbre producto de la abrupta caída de las ventas y la recesión económica.
Con el consenso de todos los ediles, se elaboró una resolución manifestando el acompañamiento del cuerpo deliberativo a los trabajadores y le solicitó al Gobierno Nacional “convocar una mesa de diálogo sectorial urgente con el objetivo de definir un plan de recuperación y fortalecimiento para la industria cerámica nacional.”
Romina Grossi, de Unión por la Patria, señaló que la inestabilidad laboral que están sufriendo los trabajadores de Cerámica Cortines tienen una explicación simple: “las políticas económicas que hoy vivimos por parte del Gobierno Nacional de Javier Milei”.
En el mismo sentido se expresó su compañero del Frente Renovador, Federico Guibaud, quien recordó lo que sucedió durante los años 70 con Martínez de Hoz como ministro de Economía, o “ en la última etapa del menemismo”, así como la gestión de Mauricio Macri. “Lamentablemente son los mismos actores”, agregó.
Además, el concejal advirtió que el ingreso de muchas importaciones se lleva a cabo bajo la modalidad del “dumping”, una estratagema empresarial que abarata el costo de los bienes provenientes del exterior respecto a su mercado local. “Uno no dice que no vengan importaciones, pero que por lo menos saquen las que están haciendo dumping para que podamos de igual a igual competir con las empresas extranjeras. Nosotros creemos en la producción nacional y creemos en el trabajo, en un salario digno.”
Por su parte, el jefe de la bancada oficialista, Joaquín Martucci, sostuvo que el modelo económico aplicado por el gobierno libertario no sólo amenaza el mercado laboral sino la propia soberanía nacional. “Tenemos que dar el debate y decir que sin industria nacional no hay soberanía posible, no hay trabajo, no hay futuro”, expresó.