Con récord histórico de participación y marcas internacionales de elite, los 21K fueron una fiesta del running. Ignacio Poza fue el mejor clasificado en una jornada que consagró al ugandés Jacob Kiplimo y a la argentina Florencia Borelli con marcas de nivel mundial.
Probablemente decenas o quizás cientos de lujanenses formaron parte el domingo de la Media Maratón de Buenos Aires, la carrera de 21 kilómetros más convocante de Latinoamérica y que este año volvió a batir récords de participación.
En total, 24.975 atletas de más de 45 países completaron el recorrido que se largó a las 8 de la mañana desde la intersección de Figueroa Alcorta y Dorrego, con salida por tandas de acuerdo al nivel de rendimiento.
El circuito, certificado por World Athletics, es considerado el más rápido de la región por su trazado llano y urbano, ideal para buscar marcas personales y así sucedió.
Encontrar a todos los corredores de Luján que participaron no es una tarea sencilla: la página oficial de la competencia únicamente consigna la nacionalidad de cada atleta, sin especificar su procedencia local. Sin embargo, este medio pudo confirmar la presencia de algunos referentes del atletismo lujanense que tuvieron destacadas actuaciones en los 21K.
El más veloz de los representantes locales fue Ignacio Poza, corredor del ICS y especialista en pruebas de trail. “La Cabra” esta vez se animó a la media maratón urbana y completó los 21K con un tiempo de 1h15m31s, lo que le permitió ubicarse en el puesto 225 de la clasificación general y en el 78 dentro de la amplia categoría (18-29 años).
Su rendimiento se destacó por la solidez en el ritmo de carrera. Promedió 3m37s por kilómetro, mejorando en los tramos finales respecto a los primeros cinco kilómetros, donde había corrido a 3m38s de promedio. Esa evolución le permitió escalar posiciones: pasó del puesto 111 en su categoría en el parcial de 5K al 78 en el resultado final.
Otro de los que dejó su huella fue Agustín Altuna, integrante del equipo Rocathlon, quien corrió con el dorsal cedido por Santiago Domecq. Completó el recorrido en 1h20m33s, con un ritmo sostenido de 3m52s en promedio por kilómetro.
El lujanense cruzó la meta en el puesto 510 de la general y logró ser 65 entre los 2.210 atletas de su categoría, lo que lo colocó dentro del 10% más rápido entre los casi 25 mil atletas, un logro de gran valor en el mundo del running.
En tanto, el corredor Matías Gómez Grosso, quien se había presentado como atleta de elite ante EL CIVISMO, quedó lejos de las expectativas que había generado. Completó los 21 kilómetros en 1h33m16s, con un promedio de 4m32s por kilómetro, lo que lo ubicó en el puesto 2.258 de la general y en el 498 de su categoría.
Los corredores atravesaron algunos de los íconos más representativos de la ciudad capital: el centro histórico, el Obelisco, el Teatro Colón, Plaza de Mayo, la Casa Rosada y la Facultad de Derecho.
El recorrido se dio por avenidas emblemáticas como Figueroa Alcorta, Carlos Pellegrini, Corrientes, 9 de Julio, Paseo Colón, Independencia y las diagonales que confluyen en la Plaza de Mayo. A ello se sumó un clima casi ideal para correr, lo que favoreció los tiempos registrados.
La organización estuvo a cargo de la Asociación Ñandú, que logró consolidar la prueba como un verdadero acontecimiento deportivo y cultural en la Ciudad de Buenos Aires.
La edición 2025 quedará en la historia de la Media Maratón de Buenos Aires no solo por la participación récord de 27.500 inscriptos, sino también por el nivel de las marcas logradas. El ugandés Jacob Kiplimo se quedó con la victoria al cruzar la meta en 58m29s, estableciendo un nuevo récord del circuito y confirmando a Buenos Aires como la carrera más rápida de Latinoamérica.
Entre las mujeres, la argentina Florencia Borelli marcó récord sudamericano, consagrándose entre las grandes protagonistas de la jornada. Además, el mercedino Laureano Rosa se coronó campeón argentino de media maratón, reafirmando su gran momento en el atletismo a nivel nacional.
La Media Maratón de Buenos Aires volvió a demostrar por qué es una de las pruebas más atractivas del calendario internacional. La masiva participación, la calidad de los atletas de elite y los destacados desempeños de corredores amateur o populares (como se lo llama en España) -entre ellos varios lujanenses- dejaron en claro que la pasión por el running sigue creciendo.